8 de junio de 2007

Humilde

Apenas un tubo de zinc con la herrumbre campando ya a sus anchas una vez que el metal abandona el cobijo de la insignificante ventana. Barrotes de hierro pintados de negro, para impedir el paso de los amigos de lo ajeno. Difícilmente entrarían aquí. Es más, difícilmente prestarían siquiera atención. Son más bien barrotes contra el miedo. Absurdos barrotes, porque el miedo está dentro.

Y un geranio. Sencillo, acomodado y confortable. Creciendo hacia todas partes sin demasiados obstáculos. La maceta modesta, de plástico. Suerte que el color casi hace pensar en el barro.

Hay una luz extraña. El sol anda bajo aún y acaricia las paredes encaladas de enfrente, mandando luego un reflejo mortecino que no llega a ser blanco. Es curioso la cantidad de blancos que existen. Este debe tener un nombre especial. Quizás blanco-discreto. O blanco-secundario. Aunque también parece un blanco oscuro, lo cual es una contradicción. Menos para quien lo mire y lo "vea" así. Quizás es un blanco-negro.

Ahora recuerdo algo. En el fondo siempre he sido un cachondo. De pequeño, más. Una vez, mi madre que mando a la tienda "da Agustina" a por una bobina de hilo negro. Me enfurruñé, como siempre que interrumpía mis sueños, y pregunté:

- ¿Claro o oscuro?

Siempre he sido un cachondo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Todos los colores suelen ser según cómo se miren. Al fin y al cabo todo depende de nosotros y de nuestro estado de ánimo, tal vez el negro no sea tan oscuro ni el blanco tan claro.... Para esto tenemos una larga gama de grises.

Beatriz Fdez. Martín dijo...

Hola, perdona que contacte contigo a través de un comentario, pero no encuentro otra forma. Soy Beatriz, de The Ultimate Safari. Compartimos enlace en el blog. Hace tiempo que lo tengo un poco aparcado, porque ahora dedico todos mis esfuerzos a Rabiosa Actualidad (donde por cierto también compartimos plantilla), mucho más dinámico y variado. Como para una página tener enlaces a otras de calidad da mucho prestigio, y si además son recíprocos, el beneficio es mutuo, te invito a que te pases por mi nuevo blog (http://rabiosactualidad.blogspot.com) y me dices. Saludos. Bea

Anónimo dijo...

Hay una frase que impacta mucho en tu texto..."Absurdos barrote, porque el miedo está dentro" Es que la fuerza está ahí, en la razón que tiene y la verdad que grita.

A menudo somos muchos los que tal vez ponemos barrotes sino a las ventanas, sí a nuestras vidas, y no precisamente por temor a lo que hay fuera.

Anónimo dijo...

e aínda que os barrotes non poidan abrigarnos do medo interior, o xeranio velará por sempre os nosos soños e construirá coas súas colores un mundo de luces que afastarán os temores.
Gústame este teu blog na outra lingua jajajajajaja ;-)